Restaupark en Volando Voy!

¡Qué experiencia tan interesante participar en “Volando Voy” instalando un Parque Canino en un refugio de perros! Este programa, liderado por Jesús Calleja, destaca la importancia de iniciativas comunitarias que no solo impactan a las personas, sino del mismo modo, también a los animales y el medio ambiente.

Participar en la instalación de un parque canino en un refugio de perros fue todo un reto a demás de una experiencia enriquecedora. ¿Te gustaría saber más sobre cómo fue el proceso?

Todo comienza con el diseño y planificación del espacio. Esto consiste en decidir cómo optimizar el área disponible para que los perros tengan un espacio seguro y divertido. Incluyendo la ubicación de áreas de juego, obstáculos y zonas de descanso.

Una vez establecido el espacio, se fabrican los módulos caninos y se procede con la instalación de elementos como vallados, puertas, rampas, túneles y otros elementos recreativos que fomenten el ejercicio físico de los perros y su estimulación mental.

Una parte importante de “Volando Voy” es involucrar a la gente local en los proyectos, lo que significa trabajar junto a voluntarios, trabajadores del refugio, etc., creando un espacio que fortalezca el bienestar de los perros mientras esperan un hogar. La colaboración con la comunidad local es un factor imprescindible para lograr el objetivo.

El programa también busca generar conciencia sobre la importancia de adoptar en lugar de comprar y de cuidar adecuadamente a los animales. Seguramente, este proyecto ayudó a dar visibilidad a los refugios y la situación de los animales sin hogar.

Trabajar en un refugio de perros, en especial en un proyecto tan positivo, ha sido una experiencia conmovedora, con un gran impacto emocional. Ver a los perros disfrutar de su nuevo parque y saber que se está contribuyendo a su bienestar fue muy gratificante.

Os dejamos un resumen de cómo fue la instalación y el resultado final de este maravilloso Parque Canino.